jueves, 8 de diciembre de 2011

El comienzo de todo - David.

Se acercó a la ventana para abrirla y correr las cortinas, ya que se acababa de levantar.
Para su sorpresa, estaba nevando. ¡Estaba nevando! Era la primera nevada del año en el barrio.
Una sonrisa asomó por su rostro, cansado de haber estado de fiesta hasta tarde.
Una música de pronto apareció de fondo. Era la radio, con los "4O Principales", sintonizada en 95.4
¿De dónde llegaba el sonido? Ni él mismo lo sabía.
- David, ¿a qué hora llegaste a noche? - al ver que tardaba en contestar, le repitió de nuevo la pregunta - Venga, contestame.

David suspiró, largo. No se llevaba nada bien con su madre, siempre estaba obligándolo a hacer cosas que él no quería, así que tampoco se preocupaba por contarle las cosas que a él le gustaban hacer.

- Pues... no lo sé, porque ni me interesé en mirar el reloj. - se giró para mirar a su madre y con una sonrisa falsa, se giró de nuevo, dándole la espalda. Su madre, cansada ya de que se repitiera esa escena durante todas las semanas, se fue, agotada por la situación.

Puso los ojos en blanco. A él tampoco le agradaba esa situación. 
Bostezó mientras se dirigía a coger el móvil. Nada. Nada nuevo.
De fondo se seguía escuchando los "4O Principales" y echó un vistazo a su alrededor.
La habitación era enorme, incluso mejor que una suite del mejor hotel. Andó hacia el baño, que también era bastante amplio y muy lujoso. Se notaba que su familia no estaba falta de dinero.

Abrió el grifo del agua fría y caliente a la vez, dejando que la bañera se llenase.
Mientras eso ocurría, se miró al espejo y se despeinó ese pelo rubio que tenía y que a tantas chicas traía locas.
Al fin se decidió y se quitó la ropa que conservaba aún, que apenas eran unos pantalones largos azules de pijama y una camiseta de tirantes blanca. Aunque estuviesen en invierno, no soportaba dormir con manga larga.

Cuando terminó, sin pensárselo, se metió en el agua.
Cerró los ojos. Se relajó, o por lo menos eso era lo que intentaba hacer. Un suspiro, otro, otro y otro más... ¿Qué le pasaba?

Había hecho lo mismo que otros jueves a la noche. Bah, ¿qué importaba? Hoy tenía las clases a la tarde, seguro que se le pasaría.

De repente, una vibración, precedida de un tono: "Lo que no ves" de Pol 3. 14.
" Antes de que amaneciera, salí huyendo de tu cama .... "

Y ahí se paró, al parecer era una llama o un toque.
¿Quién sería? La verdad, no le importaba demasiado en ese momento, pero David no sabía que en el futuro sí lo haría.

1 comentario:

  1. Me encanta esa canción! :) pásate por mi blog a ver si te gusta :3 http://howareyourmind.blogspot.com/

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